El próximo 31 mayo se celebra el Día Mundial sin Tabaco y desde ya queremos recordarles las muchas razones para dejar atrás esa adicción. Fumar es una de las principales causas de enfermedades y muerte evitables en todo el mundo. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el tabaco mata a más de 8 millones de personas al año, y se estima que esta cifra aumentará a más de 10 millones para el año 2030. A continuación, te presentamos las principales razones por las cuales dejar de fumar es esencial para tu salud.
Mejora la salud pulmonar: Fumar daña los pulmones y aumenta el riesgo de enfermedades respiratorias, como la bronquitis crónica y el enfisema. Dejar de fumar, mejora la capacidad pulmonar.
Reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares: Fumar es un factor de riesgo importante para enfermedades del corazón y accidentes cerebrovasculares. Según la American Heart Association, dejarlo reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares en un 50% después de un año sin fumar,
Aumenta la esperanza de vida: Dejar de fumar puede aumentar la esperanza de vida de una persona. Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, los fumadores que dejan de hacerlo a los 35 años pueden aumentar su esperanza de vida en 6-8 años, mientras que los que no lo hacen a los 45 años pueden aumentar su esperanza de vida en 5 años.
Mejora la calidad de vida: Fumar puede afectar la calidad de vida de una persona al disminuir progresivamente la capacidad de realizar actividades cotidianas, además de todo lo que puede significar la aparición de las enfermedades asociadas a ese hábito.
Ahorra dinero: Fumar es una actividad costosa. Dependiendo del país, fumar un paquete de cigarrillos al día puede costar entre 500 y 2000 dólares al año.
Mejora la salud bucal: Fumar puede causar problemas dentales y aumentar el riesgo de enfermedades de las encías.
Protege a las personas que te rodean: Fumar no solo es peligroso para la persona que fuma, sino que también puede afectar la salud de las personas que lo rodean. La exposición al humo del tabaco aumenta el riesgo de enfermedades respiratorias y cardiovasculares en los no fumadores.